A principios de enero, Walter Rupprecht decidió abordar un vuelo rumbo a Zúrich, Suiza, con el objetivo de encontrar ayuda médica que pudiera atender a la pequeña de tres años, Ana Lucía.
La dolorosa despedida del maestro Walter Rupprecht y de la pequeña Ana Lucía. Intentarán encontrar en Suiza lo que el gobierno de AMLO les negó aquí.
Para la memoria.
👇 pic.twitter.com/ZEyd6fVajy— Héctor de Mauleón (@hdemauleon) January 29, 2020
Ana Lucía requería un tratamiento oncológico completo, pero con el desabasto de medicina en México para combatir al cáncer, la familia buscó opciones para solucionar los dolores que aquejaban a su pequeña.
De acuerdo con Infobae, la familia tuvo que vender sus vehículos, pedir prestamos, recibieron donaciones y organizaron rifas, todo con el objetivo de tener y poder atender la leucemia de la pequeña Ana Lucía.
Desde enero Ana Lucía estuvo recibiendo tratamiento en Zúrich, sin embargo, el martes 21 de julio Walter compartió que “el estado de salud de Ana Lucía es aún muy delicado.”
De acuerdo con el mismo medio, ese día Walter también informó que el estado de Ana Lucía era delicado porque el cuerpo de la pequeña había sufrido un infarto.
“Ana Lucía está luchando por su vida, tuvo un paro cardíaco”, escribió el padre de la menor.
Walter compartió la triste noticia de que la pequeña “Ana Lucía esta muriendo, el corazón no respondió y los demás órganos dejaron de funcionar”, por lo que iba a ser desconectada a las 15:00 hrs de Suiza.
El padre de Ana Lucía, pidió al secretario de relaciones exteriores, Marcelo Ebrad, ayuda para que la familia pudiera regresar a México. Por lo que el secretario se coordinó con la embajadora Cecilia Jaber para solucionar su petición lo más rápido posible.
