Este lunes la Fiscalía General dio a conocer la captura Jesús Zeferino, a quien se le dictó el auto de vinculación por el delito de privación ilegal de la libertad y será en 3 meses cuando se determine su situación jurídica.
Todo se dio el pasado 19 de diciembre del 2020, cuando la víctima, se encontraba en compañía de su pareja sentimental en una casa ubicada en la colonia Vergel del Valle del municipio de Pabellón de Arteaga, cuando de pronto arribaron varios sujetos, entre ellos el ahora detenido. 
Ya al interior de la casa, al joven lo comenzaron a golpear, mientras le preguntaban que donde estaba su pareja mientras le daban una golpiza en todo el cuerpo.
Cuando se daba la agresión, los responsables recibieron una llamada vía telefónica, la cual pusieron el altavoz, siendo el papá de su pareja sentimental, gritándole que no “no se la iba a acabar” cuando llegara al Centro de Rehabilitación.
De ahí lo subieron a una camioneta Dodge, donde lo continuaron golpeando, siendo Zeferino se encontraba en el sitio del copiloto, la unidad donde fueron levantados comenzó a circular por las calles del municipio de Pabellón de Arteaga, hasta arribar al Centro de Rehabilitación “Pasión por las almas”, lugar donde lo bajaron a él y a su pareja.
Ya adentro del centro de rehabilitación, lo obligaron a subir unas escaleras, mientras le tapaban la cabeza con una toalla en color café, mientras continuaban golpeándolo en todo su cuerpo, posteriormente lo ingresaron a una habitación, en donde le descubrieron la cabeza y continuaron golpeándolo con sus puños.
Luego de ello, entró a la habitación una mujer quienes les pidió que llevaron a este joven con el líder religioso que se encargaba del establecimiento, al llegar a la primera planta le descubrieron el rostro, el pastor le señalo que solo porque se encontraba ocupado, sino él mismo lo dejaría lleno de sangre hasta matarlo.
Tras la brutal agresión lo pusieron a lavar los baños, tras media hora le comento a quien lo cuidaba que ya no podía lavar los baños, sin embargo como respuesta recibió otra golpiza, finalmente le indicaron que se acostara y por el cansancio, se quedó dormido.
Ya a la una de la mañana del 20 de diciembre, uno de los agresores lo despertó y le indicó que bajara al primer piso, donde el pasivo vio la puerta principal abierta, indicándole que se fuera, saliendo así del Centro de referencia, encontrándose a su madre y a un par de amigos afuera del anexo.
Mientras él era torturado, su pareja e hija quien había ordenado que lo golpearan, se había suicidado en uno de los baños, siendo en ese momento que intervino la Fiscalía General.
Tras varios días de investigación se detuvo a uno de los agresores, a Jesús Zeferino, quien ya se encuentra en el CERESO.

