Durante el periodo comprendido entre los años 2016 al 2019, Juan Carlos Luévano Cardona, efectuó aberrantes conductas de carácter sexual en agravio de su hijastra quien al inicio de estos comportamientos contaba con solo 10 años; tras comprobarse los ataques lo sentenciaron a pasar 18 años de prisión y el pago de 225 días de multa, por el delito de Violación Equiparada.
Los hechos se dieron en las inmediaciones de la casa donde ambos convivían, ubicada en un fraccionamiento del oriente del municipio capital.
Cabe señalar que en reiteradas ocasiones el sujeto tomó la oportunidad de ejercer estos aberrantes hechos cuando la madre de la menor se ausentaba para realizar actividades personales, siendo la última vez que realizó esto, cuando la niña contaba con la edad de 12 años.
Al tornarse adolescente, la víctima comunicó lo sucedido a su madre, quien le dio auxilio al acompañarla para la presentación de la denuncia, en contra del entonces probable agresor.
Una vez enviado al CERESO, este lunes se le dictó la sentencia de 18 años de prisión y el pago de una pena pecuniaria que asciende a los $16 mil pesos.
