Están libres, pero ya no pueden trabajar en la corporación.
La Fiscalía de Aguascalientes dio a conocer la captura de los Policías Municipales Luis Humberto y Miguel, acusados por el delito de Abuso de Autoridad, para lo cual se le dictó el auto de vinculación y será en dos meses cuando se lleve la siguiente audiencia, tiempo en el que estarán en libertad, pero tienen que presentarse periódicamente ante el juez y restringirán su visita y contacto con las víctimas y testigos de los hechos.
Los hechos se dieron el pasado pasado 11 de abril del año 2020, alrededor de la 01:00 a.m., cuando los policías realizaban su recorrido de vigilancia en las inmediaciones del fraccionamiento Cumbres del municipio capital.
En ese momento, detectaron la presencia de una camioneta Jeep, en color negro, dentro de la que se encontraba la víctima, una mujer y su acompañante, un hombre, por lo que bajaron de la patrulla y tocaron la ventanilla de la unidad de motor.
Ante el llamado, el hombre bajó de la camioneta y los policías le quitaron la llave del automotor, ingresándolo a la patrulla. Acto seguido, se aproximó Luis Humberto hasta donde permanecía la fémina y le ordenó con palabras altisonantes que descendiera del vehículo, para después forcejear con ella, hasta bajarla del automotor.
Mientras realizaba esa acción, le decía “yo no te puedo bajar, vamos a esperar a que llegue una policía para que te baje”, además, le indicó a la mujer que “la iba a quemar en redes sociales”.
La afectada le gritó a su mamá para que le ayudara, momento en el que la progenitora salió de un domicilio frente a donde estaba el vehículo; además, de la vivienda salió un menor de edad, quien, asustado, documentó el acontecimiento grabando con su teléfono celular.
Al detectar lo que sucedía, Luis le dijo al menor “a ti también te vamos a llevar”, se aproximó a él, lo tomó del brazo derecho, lo estampó contra la patrulla y le colocó las esposas de seguridad, llevándolo a la parte trasera de la unidad, para después subirlo a la caja, ya que el espacio delantero estaba ocupado por el acompañante de la mujer.
Fue así como dieron marcha a la patrulla, con dirección al C4, siendo que, a mitad del camino, Luis Humberto, agredió verbal y físicamente al menor, lo que le dejó una lesión en la muñeca, para después terminar el trayecto en el complejo de seguridad.
Al domicilio en el que se registró la detención, acudieron una mujer policía y el imputado Miguel, indicándole a la mujer que se la llevarían, registrándola y subiéndola al asiento de atrás.
Así fue como avanzaron a bordo de la patrulla y detuvieron su marcha en las inmediaciones de la colonia Progreso, donde Miguel se aproximó a ella y le jaló el cabello, luego le dio dos golpes con la mano empuñada en la parte izquierda de la cara, argumentando que le hacía eso para que aprendiera a respetar a los policías, indicándole que ya no dijera nada, o la seguiría agrediendo.
Al llegar al C4, la aventaron contra la pared, le tomaron fotografías y le dijeron que las iban a compartir para que saliera en el periódico.
Los afectados al ser dejados en libertad, acudieron ante la Fiscalía para denunciar a los policías y después de 3 años se les inicio el proceso.
